Excursión

Debatimos bastante sobre donde podíamos ir, no queríamos caer en algo muy cotidiano ni tampoco 'cómodo'. Otras opciones que tuvimos fueron Campana, Tigre, Monte Hermoso y hasta Uruguay, pero terminamos quedándonos con Cañuelas

Mientras estábamos debatiendo, descubrí también que era en Cañuelas donde se encontraba un ''castillo'' que vi miles de veces de chiquita mientras viajábamos en la ruta, ''El Castillo abandonado de Cañuelas''  lo que me llevo a estar contenta con la decisión, aunque resultara ser que no había forma de recorrerlo por dentro.

(Foto de Google)

Resultó ser tambíen que una de las chicas del grupo tenía una amiga en el pueblo, lo que sirvió para tener una idea, tal vez vaga, de donde íbamos y que lugares podríamos recorrer. Nos recomendó tanto su antigua Escuela ''EAS Don Bosco'' y el pueblo chico cercano, Uribelarrea. Acá empecé a dudar un poco, no quería que el lugar al que terminaramos yendo sea algo ''normal'' como un colegio secundario. Pero por suerte, después de encontrarnos con la chica de allá e ir rumbo a la Escuela, nos encontramos con algo distinto.

Antes de eso igual, tras unas cuantas conexiones de trenes y subtes, llegamos al centro de Cañuelas, donde recorrimos un poco. No sentimos que tuvieramos nada muy interesante para ver ni contar, así que nos tomamos el colectivo rumbo al colegio.

Después de bajar tuvimos que caminar varios metros más para llegar

 En el camino nuestro 'contacto' de ahí nos contaba sobre como era la experiencia en el colegio, nada que ver con la mia. Todas las tardes, después de las clases de la mañana y el almuerzo, cada uno se dirigia a su estación de trabajo, las cuales también rotaban cada un par de meses. Los chicos van o con los cerdos, las vacas, gallinas, etc, y aprenden sobre cada área en profundidad

No pensaba que nosotras nos fuésemos a acercar tanto a los animales, pero prácticamente que estábamos al lado, hasta acariciando algunos. Veíamos también la facilidad con la que los chicos se manejaban con todos los animales y sus tareas, todo muy natural.

Se nos complicó la vuelta, perdimos como dos de los colectivos que pasan cada media hora para volver al centro y ya tomarnos el tren, así que estuvimos bastante tiempo baradas en la parada en el medio de la ruta, lo que se ve las últimas fotos de los rollos del grupo.

Junto a la llegada milagrosa del colectivo

Para después cerrar el día de vuelta en el tren, casi vacío a esa hora

No tuve muchos momentos para escribir en la vitacora, había mucho que recorrer y filmar, y casi no paramos. Fue más que nada en la ida y en la vuelta que tuve tiempo de escribir o dibujar lo que se me venía a la mente